Un equipo de investigadores del MIT, en Estados Unidos, grabó estornudos y toses con cámaras de alta velocidad y al observar detenidamente estas imágenes logró mapear la secuencia de formas cambiantes que adoptan estos fluidos al salir del tracto respiratorio. Entender este proceso, dicen los investigadores, ayudará a comprender mejor cómo se propagan los gérmenes.